El 24 y 25 de septiembre próximos serán jornadas que no pasarán inadvertidas para el pueblo cristiano en todas partes del mundo. La ONG DNA Internacional propone a la iglesia cristiana sin distinción de denominación, a unirse a una jornada de reflexión y, fundamentalmente, de cambio.
Se trata del Día Nacional de Arrepentimiento, un mover espiritual impulsado por ministros de casi todos los países de América, a los que se sumaron España, Italia, Japón, India y Pakistán. Y pronto confirmarán su participación Portugal, Kenia, Congo, Puerto Rico, Inglaterra y Belice.
La intención primordial de estas jornadas es promover el arrepentimiento, unidad y amistad de las iglesias cristianas en los diferentes ámbitos. En primera instancia, el llamado va dirigido a los ministros, mediante un encuentro en el que se enumerarán aquellas razones en las que, ya sea por error u omisión, la iglesia del Señor ha fallado. Algunas relacionadas con la propia vida cristiana, y otras, con la baja influencia de la iglesia en los gobiernos y en la sociedad, que genere un cambio positivo en la misma.
El Día Nacional de Arrepentimiento tiene su origen en Venezuela, donde el pastor Jhon Jaimes (hoy misionero en Colombia), viene trabajando desde hace casi una década en la concientización de los pastores, líderes y la iglesia toda en que es necesario un arrepentimiento genuino en tiempos complicados como los que vivimos. Por eso, a través de su sitio web, DNA enumera una serie de ítems que llevan a reflexionar sobre la inacción de la iglesia en ciertos ámbitos donde debiera ejercer protagonismo para producir un cambio genuino y, fundamentalmente, un vuelco hacia Dios por parte de una sociedad que le dio la espalda al Creador.
A lo largo de estos años, más de 4500 pastores de 43 países se han integrado al Día Nacional de Arrepentimiento en sus respectivas naciones, reuniendo consigo a más de 10 mil intercesores y unos 70 medios de comunicación que se han adherido a esta campaña. Este año, se espera contar con más participación.
En la Argentina, el pastor Eduardo Guzmán es quien coordina el programa de DNA. «Es un día donde debemos arreglar cuentas de situaciones que hayan pasado entre ministros y congregaciones, divisiones, juzgamientos, contiendas, acusaciones, competencias, maltratos a otros ministros y murmuración», dice Guzmán, y agrega que «el objetivo no es excluir a aquéllos con los que se haya tenido algún roce ministerial, sino perdonarse y ser uno, en el vínculo de la paz. Luego los ministros hacemos el llamado a la iglesia del Señor y todos a una sola voz hacemos el llamado al arrepentimiento a la Nación toda. Para eso es el DNA, para arrepentimiento y unidad».
Hay tres premisas fundamentales que tienen su correlato en las ediciones de todos los países involucrados en el DNA, y son: «Sin arrepentimiento no hay avivamiento», «El único protagonista es el Espíritu Santo» y «Aprende del Señor, que es manso y humilde de corazón».
El DNA es una jornada doble, ya que el primer llamado es al arrepentimiento de la iglesia, para que luego ésta lo haga extensivo a la Nación. «Los motivos son numerosos», enfatiza Guzmán, «ya que, en muchos casos, la iglesia ha perdido el protagonismo que le fue encomendado por el Señor, y esa falta de énfasis en advertir sobre los pecados de la Nación, contribuyó a que estos se naturalizaran y en muchos casos, se infiltraran en la vida de la iglesia».
El Día Nacional de Arrepentimiento es un día para toda la iglesia y para toda la Nación. Por lo tanto, todos aquellos ministros que deseen involucrarse y ser parte de este movimiento, podrán contactarse con DNA a través del sitio web www.dnainternacional.org y sus redes sociales.
https://www.facebook.com/internacionaldna/
https://www.instagram.com/dnainternacional/
https://www.youtube.com/channel/UCWoXBD7owJd0KBu2wnRJ92Q
En Argentina, podrán hacerlo enviando un whatsapp al 11-5329-4949.
¡Dios Los Bendice!
Damián Sileo
Periodista argentino. Con más de 30 años de trayectoria en los medios cristianos de comunicación social. Autor del libro «El rock y el pop en la iglesia». Fundador de la Unión de Comunicadores Cristianos de la Argentina.
Es editor de VidaCristiana.com