La Biblia, se sabe, tiene un sinfín de versiones y traducciones que la fueron enriqueciendo a lo largo de 21 siglos. Sin perder su esencia, muchísimos eruditos, teólogos y hombres consagrados a Dios dedicaron sus vidas al estudio minucioso de las Escrituras y las llevaron a la consideración popular, a través de interpretaciones de textos antiguos y traducciones a cientos de idiomas. En nuestro idioma, hay decenas de versiones y actualizaciones que, bajo la misma premisa, dedicados lingüistas como Alberto Colunga, Francisco Cantera Burgos, Manuel Iglesias González y un nutrido grupo de traductores de las Sociedades Bíblicas, pusieron a nuestra disposición. Verónica Rocchetti hizo una exhaustiva recopilación de esas versiones dejándonos un completo listado.
1944: Biblia, Nácar-Colunga. Traducción realizada por Eloíno Nácar Fuster y Alberto Colunga. Es la primera edición de una Biblia en castellano patrocinada por instituciones católicas y con la debida autorización eclesiástica hecha con base en los idiomas originales en que fue escrita la Biblia.
1947: Biblia, Bover-Cantera. Los traductores fueron José María Bover y Francisco Cantera Burgos. También hecha desde los idiomas originales.
1966: Biblia de Jerusalén. No es una traducción del texto en francés publicado por la Escuela Bíblica San Esteban, de Jerusalén, sino que la traducción se basa en los idiomas originales, aunque sí sigue los criterios originales de la versión francesa. En 1998 se publicó una nueva edición revisada y aumentada.
1975: La Biblia, de Herder. El trabajo (tanto del AT como del NT) fue dirigido por el P. Serafín Ausejo.
1975: Sagrada Biblia, de Cantera-Iglesias. Versión crítica sobre los textos hebreo, arameo y griego, por Francisco Cantera Burgos y Manuel Iglesias González (y un grupo de colaboradores).
1976: Nueva Biblia Española. Traducción dirigida por Luis Alonso Schökel y Juan Mateos. Esta versión es muy rica por la novedad y frescura de su lenguaje.
1979: Biblia, Dios habla hoy. Más conocida como “versión popular”. Traducción interconfesional producida por las Sociedades Bíblicas Unidas. Esta versión, siguiendo el principio de traducción por equivalencia dinámica, ha logrado un texto español de gran belleza y un notable rigor exegético. En 1994 aparece la primera versión con notas de estudio. La última revisión es del año 2002.
1980: Biblia, El libro del pueblo de Dios. Traducción del P. Armando J. Levoratti y del P. A. B. Trusso, quienes contaron con un equipo de colaboradores.
1986: Biblia de las Américas. Aunque parece mantenerse, por su estilo, en la tradición de Reina-Valera, se trata de una nueva traducción, que usa como base textual las ediciones críticas de la Biblia en los idiomas originales.
1989: La Biblia traducida bajo la dirección de Evaristo Martín Nieto. Es esta una “refundición a fondo” de la traducción original (de 1964), de la que se habían hecho más de un centenar de ediciones, según dice la casa editorial en su “Presentación”.
1992: La Biblia, edición de la Casa de la Biblia, de Madrid. Esta traducción es revisión de una obra publicada en 1966 por la misma editorial. Hay una edición para Latinoamérica.
1993: La Biblia del peregrino. De Luis Alonso Schökel y un equipo de colaboradores. No es la misma mencionada antes (de L. Alonso S. y Juan Mateos), aunque se presenta como una revisión completa de ella.
1994: Biblia Americana San Jerónimo. Publicada por EDICEP (Valencia, España). Es una revisión de la traducción del P. Felipe Scío de San Miguel.
1995: Biblia, Reina-Valera. Esta es la primera traducción al castellano de la Biblia completa hecha a partir de los idiomas originales. Se publicó por primera vez en 1602 y a lo largo de los siglos ha sido revisada en múltiples ocasiones. En 1995 se publicó la última revisión patrocinada por Sociedades Bíblicas Unidas.
1999: La Biblia, Nueva Versión Internacional (NVI). Se trata de una nueva traducción, hecha de los textos en los idiomas originales, realizada por un equipo de biblistas patrocinado por la Sociedad Bíblica Internacional. Sigue los principios que se habían establecido para la traducción de su homónima en inglés (New International Version). En 2005, en colaboración con la Sociedad Bíblica de España, se publicó la versión adaptada al castellano peninsular.
2001: Biblia en lenguaje sencillo. (Castellano de Latinoamérica). Es la última traducción interconfesional al castellano patrocinada por Sociedades Bíblicas Unidas. Sigue también el principio de traducción por equivalencia funcional. En el año 2003 se le cambió el nombre, y pasó a ser conocida también como “Traducción en lenguaje actual” (TLA). Actualmente se está realizando la adaptación al castellano peninsular.
2004: La Sagrada Biblia. Publicada por la Universidad de Navarra, en 5 volúmenes. Ha sido traducida y anotada por profesores de la Facultad de Teología de dicho centro de estudios.
2006: La Biblia, Traducción Interconfesional. Se trata, como su título indica, de una traducción interconfesional en el que han participado Sociedades Bíblicas Unidas, La Casa de la Biblia y la Biblioteca de Autores Cristianos. El 1978 se publicó el NT. La Biblia completa salió a la venta a finales del año 2006.
2010: La Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente (NTV). Es una nueva traducción en la que se trabajó alrededor de diez años. Es fruto del trabajo de más de cincuenta eruditos en las áreas de teología, traducción, estudios lingüísticos, corrección de estilo, corrección de gramática, tipografía, edición y otros. También representa una asociación entre varios ministerios y editoriales como la editorial Tyndale, la Editorial Unilit y la Asociación Luis Palau. En fin, esta traducción es de fácil lectura y comprensión, y al mismo tiempo comunica con precisión el significado y el contenido de los textos bíblicos originales. La NTV es una traducción ideal para el estudio, para la lectura devocional y para la alabanza.
2005. Palabra de Dios Para Todos. Esta versión de la Biblia tiene como objetivo presentar una traducción que comunique el significado del texto original de manera agradable y de fácil lectura. Para tal fin, ha seguido principios de traducción que producen en nuestro idioma una equivalencia fiel y actual del mensaje original.
El estilo utilizado por los escritores de la Biblia, especialmente por los del Nuevo Testamento, demuestra su deseo de comunicarse de una manera eficaz. Por esta razón, los traductores de esta versión consideraron como un modelo a seguir el estilo sencillo que utilizaron los escritores bíblicos, esforzándose por presentar a su audiencia el significado del texto bíblico de una manera simple y natural. El lenguaje de esta traducción, en lugar de ser una barrera para la comprensión, es un medio para que cualquier lector descubra el mensaje de la Biblia. Esto la hace ideal para las personas que no tienen un trasfondo religioso, para los niños y jóvenes, para nuevos lectores y también para aquellos que están aprendiendo español como segunda lengua.